No todo está perdido. Antes de la subasta todavía hay posibilidades de defensa. Te damos las claves.
Los denominados “fondos buitres”, por todos conocidos, adquirieron en los últimos años importantes paquetes de pasivos bancarios a muy buen precio (se dice que la media del precio de compra no supera el 10%). Algunas entidades bancarias vendieron parte de sus créditos a estos fondos, generalmente créditos derivados de hipotecas y préstamos impagados de no fácil recuperación.
Los fondos compradores de estos pasivos se dirigieron a continuación a los deudores (empresas, particulares, avalistas, etc) reclamándoles el pago de la deuda que ellos previamente adquirieron por un bajo porcentaje de su valor.
En algunos casos, estos fondos ejercitaron acciones judiciales frente a los deudores y, en aquellos procesos ya iniciados previamente por el banco, se personaron continuando en su posición.
La hora de la subasta
Nos referimos en este artículo al supuesto en que el fondo continúa con la ejecución de una hipoteca instada por el banco y llega a solicitar la subasta de nuestra propiedad. Parecería que todo está perdido pero ¡no! existe una posibilidad de defensa…
Lo que habitualmente sucede en estos casos es que la cesión del crédito hipotecario del banco al fondo no ha quedado inscrita ni debidamente presentada ante el Juzgado, sino que ambas partes (Banco y fondo) acuerdan que la “cesión” se practique en el momento de la subasta, quedándose el fondo con el bien subastado.
Este trámite, que con toda normalidad se ha realizado a lo largo de los años de crisis financiera, puede ser anulado. El deudor podría solicitar que se declarase nula la subasta al no haberse realizado la cesión del crédito con los requisitos legales exigidos.
Consecuencias de la declaración de nulidad
La consecuencia práctica sería que el bien sigue a nombre de su titular, retrotrayendo los efectos al momento de la ejecución y pudiendo facilitar al deudor la compra del crédito por un precio mucho menor que la cantidad adeudada.
Se trata de un asunto complejo jurídicamente que debe ser estudiado por un especialista. Consúltenos sin compromiso.